En 2022, el Grupo Bohle volverá a apoyar la labor de la Aldea Infantil SOS Ennerdale, un suburbio de Jo-hannesburgo en Sudáfrica. Este es el cuarto año consecutivo en que la empresa mantiene su voluntad de donar. El aumento de niños y jóvenes necesitados de ayuda en el pueblo, causado entre otras cosas por las secuelas de la pandemia de Corona en las familias locales, demuestra lo importante que es el compromiso.
Hay mucho que hacer de nuevo para 2023. Con su donación navideña, Bohle apoya así a los responsables en la ejecución de los proyectos previstos.
La historia de James de Ennerdale
La historia de James, de Ennerdale, demuestra el éxito del trabajo in situ. Es uno de los muchos ejemplos de éxito de la Aldea de los Niños. James llegó a la Aldea Infantil SOS a los 9 años, allí creció cuidado, e-studió en la escuela con ahínco y se convirtió en una personalidad segura de sí misma. Más tarde dirigió el Foro Juvenil de Aldeas Infantiles SOS como Presidente y pasó a estudiar Gestión de Viajes y Turismo en la universidad, donde ahora celebra su exitosa graduación. "No habría conseguido mis sueños si no fuera por Aldeas Infantiles SOS y mis patrocinadores", está convencido James. "Realmente tengo un corazón ag-radecido.“
Las donaciones anuales garantizan la planificación
El apoyo sostenible es muy importante para los responsables de Bohle. Por ello, desde 2019, la empresa apoya la labor de la Aldea Infantil SOS de Ennerdale con una donación anual. La filial sudafricana está en contacto personal con los responsables in situ. Arne Klöfkorn, Consejero Delegado de Bohle AG, también visitó personalmente el pueblo y está convencido del éxito e impresionado por el compromiso de los empleados: "La trayectoria del joven James es ejemplar para el éxito del trabajo en Ennerdale. Todos contri-buimos de forma significativa al bienestar y al desarrollo positivo de los niños y jóvenes. Queremos seguir fomentándolo en el sentido de una asociación firme y, con nuestra donación, dar a aún más niños la opor-tunidad de tomar su futuro en sus propias manos."
La continuidad del apoyo también da a los organizadores locales cierta seguridad de planificación. Y esto es importante para un compromiso a largo plazo que pueda dar frutos.
La Aldea Infantil SOS de Ennerdale: un lugar de refugio y un punto de contacto al mismo tiempo
La Aldea Infantil SOS de Ennerdale lleva funcionando desde 1984. A principios de 2022, se atendía allí a unos 90 niños. niños atendidos al mismo tiempo. La aldea, situada en un suburbio de Johannesburgo (Sudáfrica), está comprometida con un futuro más prometedor para los muchos niños y jóvenes nacidos en los municipios pobres de Johannesburgo. Los niños crecen en los municipios, en parte en condiciones precarias. Los ín-dices de delincuencia y desempleo en Ennerdale son elevados, sobre todo debido a la falta de acceso a la educación y a una situación de vida bastante desesperada. Desde su nacimiento, estos niños tienen una menor esperanza de vida. La falta de desarrollo cognitivo debida a la baja educación conduce a una mayor agresividad, exclusión social, violencia, drogadicción y desestructuración familiar.
Un entorno estable, comidas regulares, escolarización y protección familiar son algunas de las piedras angu-lares del trabajo de la Aldea Infantil SOS in situ en Ennerdale. Los ayudantes acompañan a los niños y jóvenes desde la infancia hasta que empiezan sus carreras y van a la universidad. Esta ayuda es a largo plazo y sostenible. Apoya a los niños para que construyan sus propias vidas y encuentren una salida a la espiral de la vida en los municipios. Por un futuro con más perspectiva.